JESUCRISTO HA PURIFICADO NUESTROS PECADOS

"El cual, siendo el resplandor de su gloria, y la imagen misma de su sustancia, y quien sustenta todas las cosas con la palabra de su poder, habiendo efectuado la purificación de nuestros pecados por medio de sí mismo, se sentó a la diestra de la Majestad en las alturas", Hebreos 1:3

Hebreos 1:3 nos presenta una descripción gloriosa de Jesucristo, el Hijo de Dios. Se nos dice que Él es:

* El resplandor de su gloria: Esto significa que Él es la manifestación visible de la gloria de Dios. Es como un rayo de sol que emana del mismo Dios.

* La imagen misma de su sustancia: Esto significa que Él es la representación exacta de la naturaleza de Dios. Es como un espejo que refleja perfectamente el rostro de Dios.

* Quien sustenta todas las cosas con la palabra de su poder: Esto significa que Él es el que mantiene el universo en existencia por su poder y su palabra.

* El que efectuó la purificación de nuestros pecados por medio de sí mismo: Esto significa que Él pagó el precio de nuestros pecados con su propia muerte en la cruz.

* El que se sentó a la diestra de la Majestad en las alturas: Esto significa que Él ha sido exaltado a un lugar de gran honor y poder en el cielo.

Estas verdades nos enseñan mucho sobre quién es Jesús y lo que ha hecho por nosotros. Él es el Hijo de Dios, que ha venido a este mundo para salvarnos de nuestros pecados. Él es el Rey del universo, que tiene todo el poder y la autoridad en el cielo y en la tierra. Él es nuestro Salvador y nuestro Señor, que nos ama con un amor eterno.

* ¿Qué significa para ti que Jesús sea el resplandor de la gloria de Dios?

* ¿Cómo te ayuda a entender a Dios el hecho de que Jesús sea la imagen misma de su sustancia?

* ¿Qué te inspira saber que Jesús sustenta todas las cosas con la palabra de su poder?

* ¿Cómo te hace sentir el hecho de que Jesús haya efectuado la purificación de tus pecados?

* ¿Qué significa para ti que Jesús se haya sentado a la diestra de la Majestad en las alturas?

Hebreos 1:3 es un versículo lleno de significado y de esperanza. Nos recuerda que Jesús es el Hijo de Dios, que ha venido a este mundo para salvarnos de nuestros pecados. Él es el Rey del universo, que tiene todo el poder y la autoridad en el cielo y en la tierra. Él es nuestro Salvador y nuestro Señor, que nos ama con un amor eterno.

Oración

Padre celestial, te alabamos y te adoramos por tu Hijo Jesucristo. Te damos gracias por habernos enviado a tu Hijo para salvarnos de nuestros pecados. Te pedimos que nos ayudes a comprender mejor quién es Jesús y lo que ha hecho por nosotros.

Ayúdanos a vivir nuestras vidas de acuerdo a tu voluntad. Que nuestro amor por ti se refleje en nuestro amor por los demás. Que seamos testigos de tu amor y tu gracia en este mundo.

Te lo pedimos en el nombre de Jesús, nuestro Señor y Salvador. Amén.