LA RECONCILIACIÓN A TRAVÉS DE CRISTO

Romanos 5:10:

“Porque si siendo enemigos, fuimos reconciliados con Dios por la muerte de su Hijo, mucho más, estando reconciliados, seremos salvos por su vida”.

En este versículo, el apóstol Pablo nos presenta una verdad profunda y transformadora: la reconciliación con Dios a través de Jesucristo. Aquí hay tres aspectos significativos que podemos reflexionar:

Enemigos Reconciliados: Antes de conocer a Cristo, todos éramos enemigos de Dios debido al pecado. Nuestra rebelión y separación nos alejaron de la comunión con nuestro Creador. Sin embargo, la obra redentora de Jesús en la cruz cambió todo. A través de Su sacrificio, fuimos reconciliados con Dios. La enemistad se transformó en amistad.

La Muerte de Su Hijo: La reconciliación no fue barata. Fue comprada con la sangre preciosa de Jesús. Su muerte no solo nos liberó del poder del pecado, sino que también nos abrió el camino hacia la comunión con Dios. La cruz es el puente que nos conecta con el Padre celestial.

Salvación por Su Vida: No solo fuimos reconciliados por la muerte de Cristo, sino que también somos salvos por Su vida. La resurrección de Jesús garantiza nuestra esperanza eterna. Su vida victoriosa nos asegura la vida eterna junto a Él. No solo somos perdonados, sino que también somos transformados y vivimos en Su gracia.

Oración 

Querido Dios, te agradecemos por la reconciliación que encontramos en Jesucristo. Gracias por enviar a Tu Hijo para morir por nuestros pecados y abrir el camino hacia Ti. Ayúdanos a vivir en la realidad de esta reconciliación y a experimentar la plenitud de la salvación que viene a través de Su vida. En el nombre de Jesús, amén.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Aclaración

Este Blog no tiene fines de lucro, ni propósitos comerciales, el único interés es compartir los gustos y las preferencias de su autor, con personas afines. Julio Carreto. Predicador