La Tentación de Jesús

Así que, por cuanto los hijos participaron de carne y sangre, él también participó de lo mismo, para destruir por medio de la muerte al que tenía el imperio de la muerte, esto es, al diablo, (Hebreos 2:14 RV1960)

Porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que fue tentado en todo según nuestra semejanza, pero sin pecado. (Hebreos 4:15 RV1960)


Someteos, pues, a Dios; resistid al diablo, y huirá de vosotros. (Santiago 4:7 RV1960)


Bienaventurado el varón que soporta la tentación; porque cuando haya resistido la prueba, recibirá la corona de vida, que Dios ha prometido a los que le aman. Cuando alguno es tentado, no diga que es tentado de parte de Dios; porque Dios no puede ser tentado por el mal, ni él tienta a nadie; sino que cada uno es tentado, cuando de su propia concupiscencia es atraído y seducido. (Santiago 1:12-14 RV1960)


Entonces Jesús vino de Galilea a Juan al Jordán, para ser bautizado por él. Mas Juan se le oponía, diciendo: Yo necesito ser bautizado por ti, ¿y tú vienes a mí? Pero Jesús le respondió: Deja ahora, porque así conviene que cumplamos toda justicia. Entonces le dejó. (Mateo 3:13-15 RV1960)


Aconteció que cuando todo el pueblo se bautizaba, también Jesús fue bautizado; y orando, el cielo se abrió, y descendió el Espíritu Santo sobre él en forma corporal, como paloma, y vino una voz del cielo que decía: Tú eres mi Hijo amado; en ti tengo complacencia. (Lucas 3:21-22 RV1960)

Por cuanto agradó al Padre que en él habitase toda plenitud, (Colosenses 1:19 RV1960)

Porque en él habita corporalmente toda la plenitud de la Deidad,(Colosenses 2:9 RV1960)


Jesús, lleno del Espíritu Santo, volvió del Jordán, y fue llevado por el Espíritu al desierto (Lucas 4:1 RV1960)


Y luego el Espíritu le impulsó al desierto. Y estuvo allí en el desierto cuarenta días, y era tentado por Satanás, y estaba con las fieras; y los ángeles le servían. (Marcos 1:12-13 RV1960)


Porque todo lo que hay en el mundo, los deseos de la carne, los deseos de los ojos, y la vanagloria de la vida, no proviene del Padre, sino del mundo. (1 Juan 2:16 RV1960)


Los deseos de la carne

Entonces el diablo le dijo: Si eres Hijo de Dios, di a esta piedra que se convierta en pan. Jesús, respondiéndole, dijo: Escrito está: No sólo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra de Dios. (Lucas 4:3-4 RV1960)


Los deseos de los ojos

Y le llevó el diablo a un alto monte, y le mostró en un momento todos los reinos de la tierra. Y le dijo el diablo: A ti te daré toda esta potestad, y la gloria de ellos; porque a mí me ha sido entregada, y a quien quiero la doy.
Si tú postrado me adorares, todos serán tuyos. Respondiendo Jesús, le dijo: Vete de mí, Satanás, porque escrito está: Al Señor tu Dios adorarás, y a él solo servirás. (Lucas 4:5-8 RV1960)


La vanagloria de la vida

Y le llevó a Jerusalén, y le puso sobre el pináculo del templo, y le dijo: Si eres Hijo de Dios, échate de aquí abajo; porque escrito está: A sus ángeles mandará acerca de ti, que te guarden; y, En las manos te sostendrán, Para que no tropieces con tu pie en piedra. Respondiendo Jesús, le dijo: Dicho está: No tentarás al Señor tu Dios. (Lucas 4:9-12 RV1960)


Y cuando el diablo hubo acabado toda tentación, se apartó de él por un tiempo. (Lucas 4:13 RV1960)


Someteos, pues, a Dios; resistid al diablo, y huirá de vosotros. (Santiago 4:7 RV1960)


La armadura de Dios

Por lo demás, hermanos míos, fortaleceos en el Señor, y en el poder de su fuerza.

Vestíos de toda la armadura de Dios, para que podáis estar firmes contra las asechanzas del diablo.


Porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes
espirituales de maldad en las regiones celestes.


Por tanto, tomad toda la armadura de Dios, para que podáis resistir en el día malo, y
habiendo acabado todo, estar firmes. Estad, pues, firmes, ceñidos vuestros lomos con la verdad, y vestidos con la coraza de justicia, y calzados los pies con el apresto del evangelio de la paz.


Sobre todo, tomad el escudo de la fe, con que podáis apagar todos los dardos de fuego del maligno.


Y tomad el yelmo de la salvación, y la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios; (Efesios 6:10-17 RV1960)


Nuestra lucha es contra la inclinación al mal (los deseos de la carne, los deseos de los ojos y la vanagloria de la vida) que hay en todos los nosotros. Jesús era hombre como nosotros y fue tentado al igual que nosotros cuando recibió el Espíritu de Dios en toda su plenitud y fue probado antes de comenzar su ministerio; recibiendo toda la aprobación de Dios pués tuvo dominio propio, por el poder del Espíritu de Dios que habitaba en el, para soportar la prueba y así hizo durante todo su ministerio  recibiendo al final la corona de vida, que Dios ha prometido a los que le aman.


La obediencia del pueblo de Israel fue probada en el desierto por 40 años; así la obediencia de Jesús fue probada en el desierto por 40 días.


Jesús principia su ministerio
Y Jesús volvió en el poder del Espíritu a Galilea, y se difundió su fama por toda la tierra de alrededor. Y enseñaba en las sinagogas de ellos, y era glorificado por todos (Lucas 4:14-15 RV1960)

 

Fuente: http://luzverdadera.blogspot.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Aclaración

Este Blog no tiene fines de lucro, ni propósitos comerciales, el único interés es compartir los gustos y las preferencias de su autor, con personas afines. Julio Carreto. Predicador