"Porque de cierto os digo que hasta que pasen el cielo y la tierra, ni una jota ni una tilde pasará de la ley, hasta que todo se haya cumplido." — Mateo 5:18 (RVR60)
Introducción
En un mundo cambiante, donde las verdades absolutas son cuestionadas y los valores morales parecen relativizarse, las palabras de Jesús en Mateo 5:18 resuenan con una autoridad inquebrantable. Este versículo no solo afirma la permanencia de la Ley de Dios, sino que también reafirma la confiabilidad de cada detalle de Su Palabra. En este devocional, exploraremos el significado profundo de este pasaje, su relevancia para nuestra vida y cómo nos llama a vivir con fidelidad y obediencia.
1. El Contexto de Mateo 5:18
Jesús pronunció estas palabras durante el Sermón del Monte, un discurso que revolucionó la comprensión de la Ley y la justicia espiritual. Los fariseos enseñaban una obediencia externa y legalista, pero Jesús profundizó en el corazón de la Ley: la justicia que supera la de los escribas y fariseos (Mateo 5:20).
Al decir "ni una jota ni una tilde pasará de la ley", Jesús se refiere a las letras más pequeñas del alfabeto hebreo (yod, la "jota") y a los trazos diminutos que diferencian una letra de otra (la "tilde"). Con esto, enfatiza que la Palabra de Dios es perfecta en su totalidad, sin errores ni omisiones.
2. La Permanencia de la Palabra de Dios
Jesús declara que la Ley permanecerá "hasta que pasen el cielo y la tierra". Esto significa:
Su Palabra es eterna (Isaías 40:8; 1 Pedro 1:25).
Su verdad no cambia (Salmo 119:89).
Todo se cumplirá, ya sea en el tiempo de Dios o en el juicio final (Apocalipsis 21:1).
A diferencia de las filosofías humanas que pasan de moda, la Biblia sigue siendo el fundamento inquebrantable para nuestra fe y conducta.
3. La Autoridad de Jesús sobre la Ley
Jesús no vino a abolir la Ley, sino a cumplirla (Mateo 5:17). Él es:
El intérprete perfecto de la voluntad de Dios.
El cumplimiento de las profecías (Lucas 24:44).
El único que vivió en perfecta obediencia a la Ley (Hebreos 4:15).
Al afirmar que "ni una jota ni una tilde pasará", Jesús confirma que cada promesa, cada mandamiento y cada profecía se cumplirán en Él.
4. Aplicación Práctica: Vivir bajo la Autoridad de la Palabra
¿Cómo respondemos a esta verdad?
Obediencia con gozo: Si Dios cuidó hasta los detalles más pequeños de Su Palabra, ¿cuánto más podemos confiar en Él para guiar nuestra vida? (Salmo 119:105).
Estudio diligente: Valorar cada parte de la Escritura, pues todo es útil (2 Timoteo 3:16).
Seguridad en las promesas: Si Dios no deja que una "jota" falle, podemos creer que Él cumplirá todo lo que ha dicho (Josué 21:45).
5. La Palabra que Transforma
La Ley no es solo un conjunto de reglas, sino la revelación del carácter de Dios. Cuando meditamos en Su Palabra, somos transformados (Romanos 12:2). Jesús, el Verbo hecho carne (Juan 1:14), nos invita a vivir bajo Su enseñanza, sabiendo que cada palabra suya es vida eterna (Juan 6:68).
Conclusión
Mateo 5:18 nos recuerda que Dios es fiel y Su Palabra es inmutable. En un mundo inestable, podemos aferrarnos a las Escrituras con plena confianza, sabiendo que todo lo que Dios ha dicho se cumplirá con perfecta precisión.
Oración
Padre celestial, gracias porque tu Palabra es eterna y verdadera. Ayúdanos a valorar cada enseñanza, cada promesa y cada mandamiento que has dado, sabiendo que ni la más pequeña letra de tu Ley fallará. Danos un corazón obediente y fiel, que se aferre a tus verdades en medio de un mundo cambiante. Que vivamos confiados en que todo lo que has dicho se cumplirá, porque tú eres fiel. En el nombre de Jesús, Amén.
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