"Guarda, hijo mío, el mandamiento de tu padre, y no dejes la enseñanza de tu madre." — Proverbios 6:20 (RVR60)
Introducción: Un Llamado a la Obediencia
El libro de Proverbios es un tesoro de sabiduría práctica, y en este versículo, Salomón nos dirige una exhortación directa: honrar las enseñanzas de nuestros padres. En un mundo donde la autoridad y los valores familiares a menudo son cuestionados, este mandato bíblico nos recuerda la importancia de atesorar la guía que recibimos en el hogar.
Pero este versículo va más allá de una simple instrucción filial; es un reflejo del diseño de Dios para la transmisión de la fe y la moral de generación en generación.
1. La Fuente de la Enseñanza: Padres que Instruyen
Dios, en Su sabiduría, estableció a la familia como el primer lugar donde aprendemos Sus caminos. El "mandamiento del padre" y la "enseñanza de la madre" no se refieren únicamente a normas humanas, sino a principios arraigados en la Palabra de Dios (Deuteronomio 6:6-7).
El padre: Representa autoridad, dirección y corrección (Hebreos 12:9).
La madre: Simboliza ternura, consejo constante y amor práctico (Tito 2:4).
Juntos, forman un equipo que modela el carácter piadoso en los hijos.
2. El Mandato: "Guarda" y "No Dejes"
El verbo "guarda" (en hebreo "shamar") implica más que obedecer; significa atesorar, proteger y mantener cerca del corazón. No es una sumisión temporal, sino un compromiso duradero.
"No dejes": Advierte contra el abandono de estos principios. Muchos, al crecer, menosprecian las enseñanzas de sus padres, solo para descubrir tarde su valor (Proverbios 5:12-13).
3. La Sabiduría Traspasada de Generación en Generación
Este versículo resalta la importancia de la tradición piadosa. Timoteo, por ejemplo, recibió su fe genuina de su madre y abuela (2 Timoteo 1:5). Cuando obedecemos este mandato:
Honramos a Dios: Porque Él ordena honrar a los padres (Éxodo 20:12).
Protegemos nuestra vida: Los principios bíblicos evitan que caigamos en lazos (Proverbios 6:22).
Bendecimos a otros: La sabiduría aprendida se convierte en legado para futuras generaciones.
4. El Peligro de Despreciar la Enseñanza
La Biblia advierte sobre las consecuencias de ignorar la corrección (Proverbios 15:5). El hijo pródigo (Lucas 15) es un ejemplo de alguien que abandonó el consejo de su padre y sufrió, aunque luego halló restauración.
5. Aplicación Práctica: ¿Cómo "Guardar" Hoy?
Valorar la Palabra de Dios: Si tus padres te enseñaron la Biblia, continúa en ella (Salmo 119:105).
Honrar a tus padres: Aun en la edad adulta, respeta su consejo (Efesios 6:2-3).
Enseñar a otros: Si eres padre/madre, sé intencional en instruir (Proverbios 22:6).
Oración
Padre celestial, gracias por el don de la familia y por las enseñanzas piadosas que recibí a través de mis padres. Ayúdame a guardar en mi corazón Tus mandamientos y a no abandonar los caminos de rectitud que me fueron mostrados. Donde haya fallado en honrar a mis padres, perdóname. Usa mi vida para transmitir Tu verdad a las siguientes generaciones. En el nombre de Jesús, amén.
Reflexión Final:
Proverbios 6:20 no es solo un consejo para hijos jóvenes; es un recordatorio eterno de que la sabiduría comienza en el hogar y se nutre con obediencia. ¿Estás atesorando las verdades que Dios te ha dado a través de tus padres?
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